Chardin nació en París el 2 de noviembre de 1699. Fue de los pintores franceses más importantes del siglo XVIII, cuya pintura de género y naturalezas muertas reflejan la vida de la burguesía parisina. Creó una obra que contrastaba con los temas heroicos y las alegres escenas del rococó que constituyeron la corriente artística principal durante la mitad del siglo XVIII.

El dominio de la técnica le permitió a Chardin dotar a sus pinturas de una asombrosa textura realista. Lograba crear formas con juegos de luz, mediante pinceladas superpuestas cargadas de materias y destellos finos y luminosos. Los críticos le denominaron el gran mago y no hubo ningún otro pintor del siglo XVIII que le igualara.

Chardin murió el 6 de diciembre de 1779 en París.